jueves, 19 de julio de 2018

Certezas


El precio a pagar por la vida
es la muerte.
Miro lo agónico del mañana
que se escapa entre mis párpados
y me noto ciega y sola.

Quiero amanecer con los bolsillos
llenos de sangre
a la que no deberle un río
al que desembocar.

El sueño siempre es mejor,
es la única certeza,
es todo lo que me queda.

El aire de unos pulmones de talco
ya no sabe escapar de su prisión
ficticia.

Efecto placebo,
concordancia última,
decadencia primera.
Fin del único acto.

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