Miedo:
Tengo miedo de muchas cosas.
Eso nunca ha cambiado.
De pequeña, era a la oscuridad, a
las alturas, y a los monstruos.
Eso ha cambiado,
porque los miedos no desaparecen.
Sólo cambian.
Ahora, sigo teniendo miedos.
Tengo miedo de equivocarme.
De no poder gritar.
De no poder llorar.
De olvidar. De que me olviden.
De que todos los rostros que hoy me
rodean,
se conviertan mañana en un
difuminado recuerdo.
Sin forma.
De hacerme mayor.
De convertirme en quien no soy.
De no saber bien quien soy,
ni quien quiero ser.
Tengo miedo de vivir asustada toda
mi vida,
y de vivir sin temor.
Tengo miedo de que aquella
oscuridad que antes me rodeaba,
ahora esté en mi interior.
Tengo miedo de que aquella altura a
la que me asomaba temblando,
sea ahora la que tenga que saltar
para seguir adelante.
Tengo miedo, en el fondo,
de ser el verdadero monstruo de la
historia.
“No le tengas miedo al miedo. Siempre estará ahí. Luchar es inútil. Solo
aprende a convivir con ello. Puede que el miedo te llegue a proteger algún
día.”
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